Buenas queridos nuestros!!!!
Aquí estamos otro viernes más
para contaros mis aventurillas por estas tierras cada día más frías. La verdad
es que hoy me siento espeso al escribir esto, por culpa de una clase de 4 horas
esta mañana desde las 8, en la cual solo me han dejado 10 minutos escasos de
reposo.
De todas formas escribo esto con
una ilusión enorme, tanto como el primer día, o incluso más.
Empiezo con mi fin de semana, se
resume en tres cosas: bricolaje, estudiar y cerveza. Recordareis que el bueno
de mi casero estaba montando el viernes un armario y la cama de al lado. Pues
yo me fui de cervezas para no tener que aguantarlo, porque vaya si es
escandaloso. Por lo visto se quedó hasta las 12 de la noche. Para a la mañana siguiente
estar aquí a las 10h30 con el toque de diana, todo el mundo en pie para ayudar…
Me volví a largar esa mañana por no soltarle alguna… pero a la vuelta de mi
paseo matutino, ya más calmado, me puse a estudiar con el graciosillo al lado.
Me dio tanta “pena” de oírlo que no podía levantar el armario el solo que ya si
le ayudé con eso y la cama; si es que de bueno, tonto…
Así que mañana perdida, tarde de
estudio y noche de cervezas!!! Me cuesta mucho entender a esta gente, a partir
de las 12 de la noche ya no son personas, están cocidos a más no poder. Cuando
a esa hora nosotros empezamos nuestra carrera hacía un estado feliz.
Curiosamente ninguno se vuelve violento con el alcohol, son todos ultra
cariñosos, tanto que hubo uno que incluso nos declaró su amor abiertamente. En
definitiva, son felices demasiado pronto.
Del domingo únicamente destacar
la tarde de futbol con un buen saco gente: franceses, alemanes, brasileiros,
venezolanos,… 3 horas a lo bestia, que palizón!
La semana se me pasa volando con
las clases. Ya por fin apenas tengo temas de papeleo. Y como tengo tiempo libre
me dedico a polladas: tengo dos cuentas en bancos franceses diferentes, que no
os extrañe, esta gente regala dinero por ser estudiante y abrir cuenta. No es
una millonada, pero cualquier cosa es bienvenida. It’s Free!!!
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| It's free!!! |
En esta entrada quiero abordar un
poco el tema gastronómico. Si te gusta el queso, tienes que venir a visitar
estas tierras. En cualquier sitio que vayas a comprar hay una variedad de
quesos enorme, es de esperar en Francia, pero me alegra ver que no es sólo un
tópico internacional. En el menú universitario siempre tienes queso como opción,
y de varios tipos diferentes a elegir. Pero no todo es producto francés, a
ellos también les gusta nuestros productos ibéricos, y bastante aunque les
cueste admitirlo internacionalmente. No hay más que ver lo que puedes encontrar
en un gran supermercado:
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| Producto nacional! |
Y ya que hablo de comida, mención especial
para la pequeña NAT! Que siempre nos ofrece los mejores manjares, dignos de
reyes. Un pollo al horno con el que te rechupeteas los dedos hasta dejarlos en
carne viva, un puré de verduras que ríete tu de gallina blanca y su historia
rara de cocer o enriquecer; y un batido de frutas que ya quisieran los
americanos en sus fast-foods.
Y como cuando comes tienes que
beber, es preciso que hable de como puedes alcoholizarte sin beber. Anoche me
enseñaron una curiosa manera de lograrlo, y muy divertida, supongo que la
mayoría lo habréis oído, yo soy más cortito para esas cosas. En resumen, se
trata de hacer una gelatina y añadirle alcohol. Los mexicanos lo hicieron con
vodka y en vasitos chiquititos, 140 en
total XD. La pega es que el preparado era mortal, vodka puro, pero se puede
mejorar endulzándolo mucho y dándole vida con granadina por ejemplo. Aviso, yo
terminé bien, pero resulta adictivo el invento. Probadlo si no lo conocíais,
sinceramente no os arrepentiréis. Y recordad que si bebéis demasiado, haced las
cosas bien después, aquí nos avisan de antemano:
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| Ici, c'est comme ça! (aquí, es de esta manera!) |
Señoras y señores, me despido por
esta semana. Hoy me voy al Parque Astérix, pero eso ya os lo cuento en mi
próxima entrega.
Besos para todos!
Y Muchas gracias por seguir ahí.
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